VOLUNTARIADO
El voluntario de la FSEM, es un católico convencido, que libremente hace un compromiso personal con Dios, para reflejar su rostro Misericordioso, siendo sus manos, pies, sonrisa y que comparte lo que es y tiene, porque todo lo ha recibido de Dios gratuitamente y lo entrega sin esperar nada a cambio.
¿Cómo nació?
El Voluntariado de la Fundación San Ezequiel Moreno nació el 7 de Mayo de 1976 cuando Zoraida Mojica e Isabel Figueroa de Hoshino –Voluntarias Fundadoras- acompañaron al Padre Sebastián López de Murga a realizar la primera visita a una enferma de cáncer muy pobre.
¿Cuál es la motivación del Voluntario?
La motivación principal que mueve al Voluntario de la FSEM es el servicio a los demás, por amor a Dios . El voluntariado es una expresión concreta del amor de Dios, es el quehacer especial del cristiano con su actitud de entrega, servicio desinteresado e incondicional basado en los valores de la solidaridad y la fraternidad.
¿En qué áreas me puedo desempeñar?
Según sus dones, carismas y habilidades, un voluntario se desempeña como visitador de enfermos brindándole acompañamiento humano-espiritual, ofreciendo su oración diaria, perseverante por la obra y por los enfermos, o colaborando en la capacitación del voluntariado y de los beneficiarios y sus familias, asesorando en campos como enfermería, Derecho, Medicina, Psicología o en la farmacia clasificando medicamentos, en el ropero, en el empaque de mercados, en la preparación y servida de los desayunos, en trabajo de oficina, en organización de eventos etc. Son innumerables las actividades que realiza la fundación a favor de los enfermos de cáncer. La ayuda de los voluntarios es primordial pues a través de sus trabajos podemos generar recursos y cumplir con las actividades en favor de los enfermos y sus familias, como también hacer propaganda y promoción de la obra.
